EL MUNDO DE LA FILIATELIA
Ninguna de las actividades humanas escapa de la picaresca de algunos, la filatelia no es menos y algunas personas tratan de imitar los sellos para así no pagar su valor o bien los venden para sacar un beneficio. La primera falsificación de la que se tiene noticia es la siguiente:
El dos de abril de 1850, las autoridades de correos descubrieron en Orihuela (Alicante), varias cartas franqueadas con sellos falsos. Poco después se arrestaba a los culpables, al grabador Francisco Javier Martínez, alias Ballena; a un impresor Vicente Pastor y a un cartero llamado Francisco Gomís. La tacañeria del Ballena le delato, cuando intentaba mandar una carta a Gomis, con uno de sus propios sellos falsos. Las condenas impuestas en el juicio a Martínez y Pastor, fueron de 5 años de prisión y pagar 500 duros. Gomís consiguió eludir la cárcel tras pagar la fianza pero no pudo seguir trabajando de cartero.
Correos comprobó que no hubiera más falsificaciones y ordeno destruir los sellos incautados, menos uno de 6 cuartos, que fue cosido al expediente judicial, que con el tiempo se ha convertido en una valiosa pieza de colección.
Los dos sellos de la derecha son falsificaciones. |
Existen dos tipos de falsificaciones:
• Los falsos filatélicos, que son los sellos con los que algunos intentan estafar. No son ni siquiera copias de originales.
• Y los falsos postales o falsos de época, que son los sellos que intentan imitar sellos en curso legal.
Para evitar esto correos emplea una serie de armas, que son el papel de «hilo de seda» o calcografía, que es un sistema de impresión mediante planchas de metal, con el que es imposible la falsificación, porque ni siquiera el autor del grabado es capaz de repetir el relieve de los trazos y la gama de colores, además, de estos elementos podemos encontrar otros:
• Filigrana: marca al agua que se hace sobre la pasta de papel con la que se imprimirán los sellos. Las hay apreciables a simple vista; otras se descubren al trasluz; algunas solo pueden apreciarse mediante unos aparatos electrónicos o por medios químicos: los filigranoscopios o busca filigranas. Es un método costoso, por lo que cada vez se utiliza menos.
El sello de abajo es el falso, podemos distinguir que los dos métodos de impresión son diferentes. |
• Dentado de seguridad: desde 1992, en las hileras paralelas de dientes de los sellos británicos se practica, a intervalos regulares, una perforación ovalada de mayor tamaño.
• Marca secreta: señales ínfimas que se hacen en el grabado o en el cliché de un sello legítimo con el fin de detectar posibles falsificaciones, característica que la diferencia de la «marca de autenticidad», que no tiene expresamente esa finalidad. A pesar de todo, un falsificador que realice una buena reproducción fotográfica del sello puede encontrar esa marca.
• Grabado de torno: consiste en la confección de fondos y dibujos mediante un torno mecánico, que traza líneas entrelazadas. Muy usado en la emisión de billetes, también se suele aplicar sobre los bordes de las hojas de sellos para que, cuando estos se descarten, no se usen en las falsificaciones.
• Scrambled indicia: se trata de una zona de estampación difusa, en la que el texto impreso solo es visible mediante una lente decodificadora. Se usan en España desde 1990.
• Tinta fugitiva: tiene componentes que, cuando son sometidos a lavado o a cierto grado de humedad, hacen que lo impreso con ella palidezca o, incluso, desaparezca.
• Superlitho: la empresa británica House of Questa ha desarrollado un sistema de litograma que permite imprimir textos de control (como el copyright o la fecha) en un tipo tan pequeño que los falsificadores no pueden reproducirlos.
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